En una época en el cual la relación de compadres era tan sagrada ante los ojos de Dios. Cuenta la leyenda que había una pareja de jóvenes muy hermosos los cuales eran compadres, debido a ese lazo era normal verlos juntos, y así era, pasaban la mayor parte del tiempo, conversando y acompañándose en los trajines del día, hasta que empezó a nacer algo diferente dentro de ellos, ese sentimiento de amistad y hermandad, empezó a convertirse en deseo carnal y necesidad de poseer a la otra persona; hasta que ya no pudieron contenerse y sucumbieron a la tentación, a partir de ese momento empezaron a verse a escondidas en un lugar por ese entonces desolado, pero con una vista hermosa del atardecer (El Cerro Mirador) el cual se prestaba a que expresaran su amor y deseo el uno hacia el otro, a tal punto que ya no tenían remordimiento por lo que hacían y mentían a sus parejas con una naturalidad creíble, hasta que en uno de sus encuentros prohibidos Dios fue testigo de su pecado y al ver lo que estaban haciendo los maldijo y los convirtió en piedra viéndose uno frente al otro pero sin poder tocarse nunca mas.
(Realizado por JRodríguez para RomaxSiempre)
En la actualidad dos grandes rocas una frente a la otra se puede visualizar en el cerro mirador, y según el mito popular no se debería pasar en medio de ellos porque si pasas y es una hora mala las dos rocas se juntan atrapando a la victima, haciéndola desaparecer, para luego aparecer a lado de ellos como una roca de menor tamaño.
(Realizado por JRodríguez para RomaxSiempre)
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